viernes, 15 de marzo de 2013

Por gato en peligro se cuestiona el permiso al Macrolibramiento



Biólogos y ambientalistas acreditan la presencia del felino en el valle de Tlajomulco de Zúñiga, pero consultora de la MIA nunca lo encontró. Esta foto es de un ejemplar de Nayarit, cortesía de Biodiverso AC/Carlos Villar

Agustín del Castillo / Guadalajara. MILENIO JALISCO

Herpailurus yaguarondi es el nombre científico de un gato salvaje que pesa entre siete y nueve kilogramos, con un largo de hasta 1.25 metros, esbelto y de cola tan larga como su cuerpo. Su coloración es de parduzca a oscura y jaguarundi se ha convertido casi en su nombre común, pero los habitantes del México rural lo han bautizado como onza o leoncillo.

Este depredador está en la lista de especies que protege el gobierno mexicano (NOM 059), lo que significa que su presencia en alguna zona donde se pretenda realizar un desarrollo inmobiliario o de infraestructura, condiciona fuertemente lo que se pueda hacer ahí.

Un colectivo ecologista y de ciudadanos de Tlajomulco acaban de dar con un dato revelador: el jaguarundi deambula en la zona del trazo del Macrolibramiento de Guadalajara. Hay evidencias fotográficas. El dato es una herramienta clara para obligar a considerar los pasos de fauna en la zona del valle.

Sorprendentemente, tanto la manifestación de impacto ambiental (MIA) que aprobó la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) en 2004, como el estudio técnico justificativo para el cambio de uso de suelo forestal, aprobado hace apenas un año, nunca aportaron datos de su presencia. Tampoco hay condiciones de la estatal Secretaría de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades, hoy Semadet).

Las cámaras de la asociación Aura Jaguar detectaron a los felinos en la zona cercana a la laguna de Cajititlán. La historia se narra en http://www.aurajaguar.org/index.jsp?id_page=115&id_story=250.

“En el recorrido del 17 de febrero de 2013, por la zona del macrolibramiento que rodea San Miguel Cuyutlán, salimos de una cañada y trepamos al camino de piedra; a unos cien metros [vimos] una figura oscura muy quieta a mitad del camino, [y] pensé ¿será una piedra con forma de animal? en eso se movió su cola y dejó claro que era un felino, un jaguarundi, pelaje liso y café oscuro, de baja estatura, cuerpo largo y cola larga y gruesa, apenas a 40 metros de una de las estacas que marca el paso del macrolibramiento”, señala José Leyva, de esa asociación .

“Habiendo tomado miles de fotos con cámaras trampa nunca hemos logrado una foto de un jaguarundi, y frente a mis ojos se presentaba en silencio el misterioso animal. De la derecha del camino bajó otro felino, mismo color, más pequeño, y atrás un tercero: una madre y sus dos crías para nuestra gran sorpresa. Los tres felinos nos escucharon y mostraron la indiferencia y calma de un depredador. Caminé a la sombra y en silencio hacia ellos, la madre y dos crías cruzaron el camino con toda calma y siguieron cuesta abajo en dirección de un venero cercano. La selva baja caducifolia los hizo invisibles. Y Adolfo Sánchez [fotógrafo que lo acompañaba] logró una foto”. Pero la conclusión es pesimista: “Estos especímenes y su futuro están seriamente amenazados con la barrera infranqueable de cuatro carriles y una barrera intermedia que se planea construir”.

De esta información, la autoridad ambiental no ha emitido opinión ni muchos menos alguna decisión que modifique las condiciones de la obra.

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Un grupo de trabajo

La preservación de la flora y fauna de los ecosistemas de la región metropolitana de Guadalajara, que serán afectados por el trazo del macrolibramiento de 111 kilómetros, ha motivado la creación de un grupo de trabajo que incluye a las siguientes asociaciones: Aura Jaguar, Biodiverso, dirección de conocimiento y vida silvestre del Bosque de la Primavera, Selva Negra, Ayuntamiento de Tlajomulco y Océanos Expediciones y Buceo.

Este grupo pretende hacer valer los conocimientos recabados en la zona para que se modifiquen las condiciones de la obra, lo que implica, básicamente, la construcción de pasos de fauna en diversas áreas que no habían sido consideradas en el trazo. La pretensión es que las autoridades ambientales, del estado y federal, se pronuncien sobre el tema y apliquen la ley para proteger esa y otras especies en riesgo.

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Documentan situación del jaguarundi de Cerro Viejo

La asociación civil Aura Jaguar ha hecho públicas fotografías tomadas por sus cámaras fijas que revelan la existencia de familias de jaguarundis (Herpailurus yagouaroundi) en la zona de Cerro Viejo, que pronto contará con un decreto estatal de área natural protegida, lo cual pone en entredicho la autorización existente para el Macrolibramiento de Guadalajara, pues esta ruta carretera representaría un bloqueo al corredor por el que se mueven esos mamíferos que están bajo estatus de protección en la norma oficial mexicana 059, y en la Convención Internacional de Trafico de Especies Silvestres (CITES).

"Luego de varias semanas de exploración por la zona por donde se prevé que pase el macrolibramiento, hemos detectado varias especies interesantes, entre ellas está el jaguarundi, venado, pecarí, zorro gris y mapache. Es muy importante señalar que en la Manifestación de impacto ambiental del Macrolibramiento no se mencionan estas especies, por lo tanto el diseño de la carretera resultará en una barrera mortal para los animales que hoy en día utilizan los corredores biológicos que serán seccionados por dicha obra", destaca José Leyva en http://www.aurajaguar.org/index.jsp?id_page=115&id_story=252

"Detectamos veneros, aguajes y manantiales que quedaran separados del área principal de Cerro Viejo, por tanto en época de secas los animales intentaran llegar al vital liquido [sic], aun con la carretera funcionando. Se ha dicho que hay cientos de pasos de fauna, sin embargo todos son tubos de concreto de un máximo de 1.5 metros de diámetro por hasta 80 metros de largo, que apenas serán suficientes para una lluvia ligera, ya que toda la cara norte de Cerro Viejo va a desembocar a estos arroyos secos. Es imposible que algún mamífero cruce por estos túneles".

La información destaca que los jaguarundis "se describen generalmente como animales solitarios, sin embargo en una foto vemos un grupo de cuatro especímenes.

Probablemente el macho, en tono rojizo es el padre de las dos crías que siempre siguen a la madre [ver fotografía anexa]". Además, "la planimetría de la foto de la madre nos da información valiosa: Mide 29 centímetros de alzada, cabeza y cuerpo 58 centímetros y una cola de 42 centímetros, de los felinos mexicanos es el que tiene la cola mas larga en relación a su cuerpo con 74 por ciento, en comparación el margay tiene una relación cola/cuerpo del 65 por ciento, lo cual confirma que esta perfectamente adaptado a cazar en los árboles o en terrenos muy inclinados. Los felinos, un macho, una hembra y dos crías fueron observados y fotografiados, a sólo 40 metros de donde se encuentran las estacas que marcan los puntos por donde pasará la autopista de cuota".

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